Translate

martes, 4 de febrero de 2014

Pensión de Caballeros- 5° Cap - Cont - "Paloma"

Sola, dedicada a la tarea de preparar el almuerzo para llevar al río, Paloma revive en su mente la charla que tuvo con Manuela hace unos días, mientras compartían unos mates, y luego de la irrupción de Esteban en la cocina. Su amiga la conoce bien y tiene la particular habilidad de ver a través de ella.
-Decime, ¿Qué está pasando acá? - le había preguntado, entonces.
-¡Nada, nena! ¿Qué va a estar pasando? -había contestado Paloma, con su mejor cara de inocencia.
-Ojo, Paloma, que te conozco hace mucho y a mí no me podes engañar...
-Me parece que estás viendo cosas que no existen...
-Tené cuidado, mirá que podes estar jugando un juego peligroso...
-¿De qué hablas?
-Si no estas segura de lo que haces, no le des señales a este hombre, que vas a terminar hiriendo sus sentimientos...Ahora, si te parece que estás sintiendo cosas por él, te convendría poner en orden tus asuntos y entonces, darte una segunda oportunidad, que te la mereces...
-Manu, no pasa nada, te lo repito. Quédate tranquila...
-Sabes que te deseo lo mejor y no te digo esto para joderte, pero, Esteban parece un buen tipo y es mejor que aclares las cosas antes de que se compliquen...
-Estás exagerando, como siempre...
-Bueno, como digas. Vos sabrás lo que hacés...
Esa conversación, la tenía perturbada. Tal vez tuviera razón y, de manera inconsciente, estaba alimentando un sentimiento en Esteban que no sabía si podría corresponder. En ese caso, si Manuela estaba en lo cierto, no se encontraba en el mejor momento para iniciar una relación. El solo pensar en Cesar, que era una amenaza latente, y en Lucas, a quién había sometido a una vida prácticamente nómade, y en su situación actual, ocultándose, escapando y evitando enfrentarse a las circunstancias.
El solo hecho de no poder ir a ver a su madre, para no exponerse, sabiendo que la necesitaba, le causaba más dolor que un puñetazo o una cachetada de las que solía propinarle su ex.
Preparando la comida para el picnic, Paloma se promete que no va a estar triste, que va a cambiar de actitud y va a enfrentar a quién sea para ser una mujer libre y sin temores. Enjuga una lágrima, que rueda por su mejilla, y brinda su mejor sonrisa a Esteban, cuando viene a avisarle que ya están todos listos para partir.

No hay comentarios:

Publicar un comentario